viernes, 16 de abril de 2010

Érase una vez….




Con esas palabras empiezan casi todas las historias.

Y como en todas, en esta hay un chico y una chica como protagonistas. Bueno, al menos así era en tiempos de mi abuelita, porque ahora, en la era del Yaoi y Carol Lynne, el asunto se hace bastante discutible y… mucho más interesante.

Pero bueno, no dejemos que la mente divague por tales derroteros que luego no hay quien apague el incendio.

¿En donde estábamos? Ahh si. Un chico y una chica.

Él soñaba con construir puentes, castillos y fortalezas de hormigón y argamasa. Ella sólo quería vivir una aventura.

Jamás imaginaron que sus vidas cambiarían gracias a algunos acontecimientos de insignificante apariencia.

Un catarro, una bufanda a medio tejer, una carta entregada a la persona equivocada y una dotación de calditos knorr suficiente como para preparar sopa para un batallón.

Y después dicen que el destino no tiene sentido humor…

No hay comentarios: